Como todos sabéis el Nafarroa Oniez de este año fue un poco extraño. Todo comenzó la madrugada del día 19, cuando una gran tormenta quiso acabar con el trabajo realizado por todo@s l@s voluntari@s durante dos años de preparación, el aguacero dejo áreas inutilizadas, txondas destrozadas y escenarios hundidos en el barro, a la vez de impedir el acceso a todas las zonas de aparcamiento. Parecía el final de Oinez 03 pero los voluntari@s decidieron continuar con los actos programados que todavía se podían realizar.

A partir de aquí la gente se empezó a separar. Mientras unos aguantaban la lluvia viendo algún espectáculo otros se refugiaban para tomar un tentempié.

A la hora de comer el tiempo dio un respiro y paro de llover, para no volver a caer. Alguna gente en este momento se animo más, otros ya estaban bastante animados. En estos momentos estábamos en las txondas montadas en la plaza del pueblo. Amig@s, conocid@s, amigos de conocidos, todos nos lo estábamos pasando en grande, también los que querían volverse en el autobús a la mañana.

A las 6 de la tarde nos acercamos al área uno para ver el concierto de Gozategi, uno de los pocos que se pudieron ver. El grupo consiguió agradar a todos los asistentes con su patxanga y canciones pegadizas.

Después de esto nos fuimos a coger el autobús en el pueblo.

En el autobús de vuelta se vio la fatiga de un día de fiesta y alguna cara triste por que esta, se había acabado. Algunos, pensaron en toda la gente que había hecho posible este día de fiesta y que, por culpa del tiempo, no pudo ser lo que debía haber sido, una importantísima ayuda a la gente de la Ikastola Arangoiti de Lunbier, que necesita urgentemente un edificio nuevo donde enseñar la lengua de nuestra tierra, aunque algunos se empeñen en negarlo y atacarlo constantemente.